Contra las etiquetas

Por: Alma Delia Fuentes | |

Estoy un poco cansada de las etiquetas, porque tengo la impresión que mientras perdemos tiempo tratando de "actualizarnos" revisando nuevas tendencias en la web y entendiendo categorías y descifrando clasificaciones, la web sigue avanzando sin importarle nuestros desvaríos, ignorancias, angustias o usos de la misma.

Trataré de explicarme: estoy estudiando el tema de web semántica, y mi primera sorpresa fue conocer esa etiqueta para la evolución natural del sistema de empaquetamiento y localización de data en la web.

Otros la conocerán como Internet de las Cosas y otros como Web 3.0, aunque no son precisamente lo mismo, si nos ponemos puristas.

Y aunque como estudiosa de la evolución web, me interesan las precisiones, como periodista la verdad es que no me parecen ni interesantes ni útiles, ¿por qué? Pues porque lo importante es CÔMO podemos usar las herramientas tech para la hechura de un periodismo de calidad, como periodista eso es lo que me resulta fundamenal y el resto es cultura, indispensable en estos tiempos, pero bagaje cultural al fin.

La web semántica busca el reconocimiento por parte de los robots de búsqueda no de palabras clave -como lo hacen ahora- sino de conceptos.

Y esto es interesante y muy útil, pero producto de la evolución misma del uso de la web. Recordemos viejos buscadores, muchos de los cuáles murieron o al menos fueron aplastados por Google: Ask Sam por ejemplo, que ahora es ask.com, "respondía" a las preguntas que el usuario planteaba en "lenguaje natural" : ¿quién es el presidente de México?, por ejemplo, y el 1er resultado era la bío de Chente Fox.

O A9 un buscador que presentaba los resultados en una pantalla dividida verticalmente entre imágenes y ligas, y cuyos resultados eran realmente buenos y precisos. Frente a la avalancha Google, ahora es un buscador de productos.

Otro buscador que verdaderamente me encantaba cuando no existían los agregadores de noticias era Vivisimo que desde hace 5 años ya presentaba resultados categorizados -noticias, links, productos- y los empaquetaba por categorías. Hoy evolucionó a Clusty y sigue ofreciendo resultados "en paquete", lo cual ahora me resulta entretenido pero me decepciona que no hayan sido capaces de innovar un poco más.

Kartoo es un buscador que también uso desde hace añooooooooos y cuya principal monería es presentar los resultados conceptualmente usando el modelo de mapas mentales, ¿qué tal? ¿semántica?

En fin, podría seguir y seguir sacando de mi clóset viejas prendas web con ejemplos de este desarrollo al que hemos contribuido todos los usuarios web y que eventualmente consolidará los sueños/profecías de Tim Bernes-Lee.

Lo importante me parece es usarlos, conocer estos recursos y sacarles provecho para hacer periodismo. Google, que es maravilloso y al cuál soy adicta, NO es fuente, es un buscador, y sea que busque conceptualmente o por palabra clave, hasta ahora lo importante sigue siendo COMO buscamos, y para ello reciclo tres consejos super básicos que siempre doy en mis talleres:

-Debes tener claro QUE información buscas
-CUÁL puede ser la fuente (un organismo internacional? una institución de gobierno? un informe de una ONG?)
-DÓNDE se generó la información (en tu país? en EU? geolocalización!)

Dice SCrucianelli sobre la web semántica (perdón x citarte sin permiso Sandra): "No sólo (es) recolección de datos; sino producción de nueva información.
Significa utilizar los documentos con datos para “construir” nuevos documentos con primicias o informaciones desconocidas". O sea, hacer periodismo, y hacerlo bien!